A mediados de la década de 2010, la industria de la televisión se centraba en la innovación más allá de los trucos superficiales para mejorar la experiencia visual general. La tecnología 3D nunca tuvo tanta aceptación entre los consumidores como se esperaba. Los investigadores querían mejorar la calidad de la imagen.
Esto los llevó a experimentar con diseños de pantalla curva a principios de la década de 2010 como una forma de optimizar potencialmente las imágenes más allá de simplemente mejorar los componentes internos de la pantalla. Los primeros modelos de televisores curvos lanzados en 2013 generaron revuelo inicial, pero los precios eran extremadamente altos en ese momento. El interés cayó drásticamente en los años siguientes. Ahora, casi una década después, los precios de los televisores curvos han caído significativamente y se han convertido en opciones más asequibles en comparación con las pantallas planas modernas. Antes de considerar un televisor curvo, es importante comprender qué pretende lograr visualmente la tecnología y si los avances han hecho que los beneficios sean realmente perceptibles para el espectador promedio.
Los televisores curvos tenían como objetivo mejorar la experiencia visual envolviendo la pantalla en una curva muy parecida al campo de visión del ojo humano. Esto estaba destinado a ofrecer una sensación más inmersiva al espectador. Sentado en la posición de visualización óptima, la calidad de la imagen podría ser excelente con una pantalla curva. La curva ayuda a enfocar la luz que ingresa a los ojos, mejorando el contraste y la percepción de profundidad en la imagen. Muchos modelos curvos también utilizan técnicas de procesamiento para aprovechar aún más este efecto de profundidad. Además, la curva redirige la luz para mantener la nitidez sin importar la distancia desde la pantalla, lo que permite una visualización clara desde más ubicaciones en habitaciones grandes siempre que el punto ideal esté ocupado y los ojos estén rectos sobre la superficie curva.
- El objetivo de la pantalla curva era imitar la visión binocular humana y proporcionar una experiencia de visualización envolvente para una mejor inmersión.
- Sentarse en el "punto ideal" permite a los espectadores aprovechar al máximo la luz enfocada y la percepción de profundidad mejorada que permite la curva.
- Los televisores curvos concentran la luz que ingresa a los ojos de manera uniforme para mejorar el contraste en comparación con las pantallas planas.
- El posprocesamiento aumenta la sensación de profundidad similar a la 3D que proporciona la curvatura natural.
- La claridad de la imagen se mantiene en diferentes distancias/ángulos dentro de la zona de visualización óptima, a diferencia de las pantallas planas.
- Siempre que el punto ideal esté ocupado directamente delante del panel curvo, la visibilidad debería ser de alta calidad incluso desde asientos más alejados en habitaciones grandes.
- La curvatura pretende imitar la visión humana natural de forma más fluida que un televisor plano estándar, envolviendo la pantalla alrededor del espectador.
En resumen, ubicarse en el lugar principal permite a los televisores curvos aprovechar las ventajas ópticas para una mejor inmersión, contraste y percepción de profundidad en comparación con los televisores de pantalla plana tradicionales.
Si bien los televisores curvos eran capaces de ofrecer una calidad de imagen mejorada desde la posición de visualización óptima, su tecnología también introdujo algunos inconvenientes que limitaron su adopción generalizada. Más allá de los altos costos iniciales, la forma curva restringió la experiencia visual. Fuera del preciso "punto óptimo", la calidad de la imagen sufrió notablemente en comparación con una pantalla plana. Una iluminación adicional en una habitación también podría provocar fácilmente reflejos en el panel curvo en detrimento de la imagen. Quizás lo más problemático fue el estrecho ángulo de visión, donde los espectadores más allá de cierto punto no podían ver partes de la pantalla.
Para salas de estar grandes destinadas a grupos, este único punto óptimo socavaba el propósito de un televisor grande. Si sólo un miembro de la familia pudiera experimentar la mejora en la exhibición desde el punto óptimo, se convertiría en una fuente de irritación. Un modelo curvo funciona mejor para verlo en solitario desde un espacio dedicado con movimientos limitados. En la mayoría de aplicaciones familiares o de entretenimiento, una pantalla plana convencional sigue siendo una opción más segura.